Compositor: Género: Guaguancó Grabación: Orlando Contreras, "Guaguancó"Así mismo fue
como sucedió
Así son las cosas
cuando son del alma
En un tétrico hospital
donde se hallaba internado,
casi agónico y rodeado
de un silencio sepulcral,
con su ternura habitual,
la que siempre demostró,
quizá con esfuerzo o no
desde su lecho sombrío,
un enfermo amigo mío
esta carta me escribió.
"Querido amigo quisiera,
que al recibir la presente,
te halles bien, y que la suerte
te acompañe por doquiera.
Por mi parte, más quisiera
decirte que estoy mejor,
al contrario, en mi dolor,
postrado en un lecho yerto
ya soy un pobre esqueleto
que a mi mismo me da horror.
"La carta es para decirte
que si podés algún día,
vení a hacerme compañía
vos que tanto me quisiste;
yo estoy tan solo y tan triste
que lloro sin contenerme,
ya nadie suele quererme,
todos se muestran impíos,
de tantos amigos míos
ninguno ha venido a verme.
"Pues hoy te doy la razón
quebrao' en mi soledad,
que esa llama de amistad
es tan sólo una ilusión.
Cuando uno está en condición
tiene amigos a granel,
pero sí el destino es cruel
y hacia un abismo nos tira,
ya vemos que todo es mentira
y que no hay amigo fiel.
"Bueno, aquí yo me despido,
y al poner punto final
recibe un abrazo leal
de quien tanto te ha querido.
Y a tu mamá, que no olvido,
también mi recuerdo dale,
mucha devoción móstrale
y de caricias cólmala...
Vos que la tenés cuídala.
¡Si supieras cuánto vale!"
Llegó el domingo, y ansioso
por aquel amigo leal,
penetré en el hospital
cabí bajo y pesaroso,
me dirigí silencioso
al lugar donde estaría
mas allí no lo encontré.
y asombrado me quedé
al ver la cama vacía.
Y así mismo fué
como sucedió
Así son las cosas
cuando son del alma